sábado, 21 de noviembre de 2009

Odiar (x Don Aproposito)

Debo confesar mi odio, debo confesar que cuando odio no puedo perdonar, me es infinitamente imposible perdonar.
Muy pocas veces y a muy poca gente, pero lo hago, odio con todas las emociones, con todos los sentidos, odio verte y tomar atención a tus palabras solo empeora la situación.
Debo ser el único, no conozco a nadie más que lo haga como yo y sobre todo a ti, que nunca quedas mal con nadie y lo sabes todo.
Solo deberías callar y mirar por sobre tu hombro como el mundo sigue girando.

Debo confesar que podría matar por odio, no creo que en el momento pueda contener mi rabia, así que te aconsejo que te calles la boca y te alejes de mi.

Debo confesar que mi mente se transforma, porque no lo digo, no le digo a nadie cuanto te odio, me lo guardo y me envenena en silencio. Y pienso en cuanto daño lograría causarte si tan solo te acercaras un poco más, tal vez con mi lápiz, con mi vaso o simplemente con mis manos

Debo confesar, debo confesar, que podría perder mi libertad, mi vida por verte en el suelo, sangrando.
Me gustaría que desaparecieras del mapa, así sin dejar rastro y a todo aquel que mencione tu nombre le clavaria una estaca en el pecho, está prohibido perdonar, olvidar.

1 comentario:

  1. Tus sentimientos son universales. Si yo te contara cuántas veces he matado mentalmente a gente que de nada he odiado. Creo, sin embargo, que al escribir sacas el "demonio" fuera y que tal hecho impide que sigas envenenandote.
    Felices fiestas.
    Oli

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